Explora Sofía Echeverri la figura femenina de poder en rituales indígenas, en su muestra Universa revelada

La artista tapatía aborda una crítica del patriarcado a partir de rituales indígenas, en tres proyectos resultantes del programa Artista en residencia del MUSA

¿Cómo sería el presente si el pasado prehispánico femenino se hubiera leído como si se hubiera tratado de varones?

Mientras que los antropólogos y arqueólogos han nombrado a figuras prehispánicas masculinas con títulos como “gobernante”, “chamán”, “guerrero”, a las femeninas sólo se les bautiza como “mujer sentada”, “mujer de pie” u otros.

Ese hecho motivó a la artista plástica tapatía Sofía Echeverri a transmutar esa memoria histórica a lo femenino en la muestra Universa revelada, que estará expuesta del 15 de julio al 29 de agosto en el Museo de las Artes (MUSA) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) y que es resultado del programa Artista en residencia.

La exposición incluye 33 piezas, entre pinturas, dibujos e instalación, como parte de una investigación antropológica y otra arqueológica sobre ritos de pueblos originarios mexicanos; en especial de los del Occidente del país: Michoacán, Jalisco y Nayarit.

“Es una invitación a reflexionar sobre la historia que nos han contado de la imagen de la mujer y ciertos cuestionamientos sobre ausencias y omisiones durante todos estos siglos”, compartió la creadora.

Universa revelada está compuesta de tres proyectos que abarcan distintos espacios de la planta alta del MUSA: “Pedir la lluvia”, en la que se muestran dibujos, máscaras rituales y pinturas donde protagonistas mujeres son ahora las que comandan los rituales para pedir abundancia.

Ahí, traductoras, tastoanas, tlahuilas y más están plasmadas en paisajes monocromáticos donde notables trazos de color irrumpen; algunas de esas obras son “Tastoana en Chapala frente a la barranca de Huentitán” o “Traductora huichola con sobrero de machetes”.

“A la hora de hacer la investigación me di cuenta de que los varones son quienes tienen el poder y el derecho de portar una máscara, de ingerir sustancias de manera sagrada que les alteran el sistema central y de bailar para pedir la lluvia; mientras tanto, las mujeres siguen sus labores domésticas y de cuidado. Mi cuestionamiento es: ¿Cuándo es el tiempo para hacer catarsis, para jugar y tener total libertad y goce?”, detalló la creadora.

Otra sección de la muestra es la de “Arqueología secreta”, donde se cuestiona sobre el hecho de a que las cerámicas prehispánicas de mujeres se les identifican por su sexo y no por su oficio.

Aquí, varias pinturas fueron intervenidas en el sitio con la intención de “extenderlas más allá” del cuadro mediante figuras geométricas que buscan eliminar la etiqueta de “figura femenina”, que vuelve anónimas a las mujeres.

Sofía Echeverri indicó que la residencia artística en el MUSA en la que participó, consistió en tener al público visitante del museo como espectador en el proceso de creación, pues una de las salas se convirtió en su taller.

“Al mismo tiempo se convive con ellos; fue muy interesante, pues sí hubo hallazgos. La gente retroalimenta acerca de los señalamientos que tengo, sobre todo de “Arqueología secreta”, donde a las figuras arqueológicas femeninas les asigné profesiones y oficios”, refirió.

Por último está “Señoras del saber”, una instalación al interior de una sala oscura donde 10 figuras totémicas (creadas con pedazos de ropa, cerámicas, plumas y más) se congregan en semicírculo para representar el promedio de 10 feminicidios diarios que ocurren en México.

Al interior se escuchan 10 voces de mujeres que entonan consignas feministas de la colectiva chilena Lastesis, leídas en 10 lenguas originarias de México (náhuatl, tlapaneco, mazateco, chinanteco, zapoteco, mixteco, mixe, tzeltal, tzotzil y maya).

“De ahí que la instalación invoque, como canto sagrado, el fin de la estructura actual del crimen e intimidación contra las mujeres”, detalla Zyanya Mariana en el texto curatorial.

Sofía Echeverri añadió que presentar su obra en el MUSA es un logro personal, ya que se trata del museo de su Alma mater; ella es egresada de Artes Visuales de la UdeG.

El coordinador de Exposiciones, Vinculación y Desarrollo de Proyectos del MUSA, Moisés Schiafinno, recalcó que esta muestra es resultado del apoyo del Legado Grodman, coordinado por la University of Guadalajara USA y que toda persona podrá visitarla con las respectivas medidas sanitarias.

  • Boletín Informativo No. 272
    Iván Serrano Jáuregui
    Viernes 16 de Julio de 2021
    Guadalajara, Jalisco
    Fotografía: Gustavo Alfonzo