Realizan la charla “Políticas migratorias en México”, en el CUCSH
Las caravanas migrantes dejaron atrás la clandestinidad en que había estado envuelta la migración y mostraron al mundo las dificultades y abusos por los que deben pasar las personas que buscan una mejor vida fuera de sus lugares de origen, declaró el maestro David Israel Martínez Rodríguez, académico del Centro Universitario de Tonalá (CUTonalá), de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
“Una caravana migrante rompe con el esquema tradicional de la migración que hasta entonces estaba en la clandestinidad para ser visible y, a partir de ello, nos damos cuenta del drama que atraviesan las personas que están en esta situación”, afirmó durante la charla “Políticas migratorias en México”, como parte del Círculo de Análisis sobre Derecho y Justicia, organizado por el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) y transmitida mediante redes sociales.
El doctorante y especialista en Derechos Humanos aseguró que las personas que deciden migrar de manera irregular están en una situación de vulnerabilidad, aunque cada vez es más común encontrar a niñas y niños, adultos mayores y personas de la comunidad lésbico homosexual, quienes por sus condiciones están expuestos a mayores riesgos que otros grupos.
Recordó que desde la administración del presidente estadounidense Donald Trump, las niñas y niños migrantes fueron encerrados en centros de detención y se registraron casos de maltrato y muerte. Aunque el actual mandatario, Joe Biden, prometió un mejor trato, “no hay una política migratoria clara” y los centros de detención permanecen abiertos, y con ellos las condiciones antiderechos humanos para los menores.
El licenciado Mauro Pérez Bravo, miembro de la Red de Casas del Migrante en Chiapas, Sonora (México) y Guatemala, dijo que las falencias de las políticas públicas hacia la movilidad humana radican en enfocar todos los esfuerzos de contención en las fuerzas militares, debido a que los países han concebido a la migración como un asunto de seguridad nacional.
El activista y especialista afirmó que el Instituto Nacional de Migración (INM) mexicano tiene el objetivo de evitar que los migrantes se conviertan en un peligro para la nación, y no hay una perspectiva de Derechos Humanos, por lo que propuso que esta dependencia salga del Sistema Nacional de Seguridad para dar un enfoque más humanitario a quienes atienden. Esta visión permea a la población en general, que ve en los migrantes a personas de peligro y eso propicia que los rechacen, los discriminen o maltraten, expresó.
La doctora Sandra Elizabeth Álvarez Orozco, abogada del área de Asilo y Protección Internacional en la asociación Sin fronteras, aseguró que la política migratoria se ha situado como una moneda de cambio para los intereses de Estados Unidos de América (EUA), como sucedió con la reciente firma del Tratado de Libre Comercio con México y Canadá, en el que el gobierno estadounidense condicionó el acuerdo a la contención a los migrantes.
Señaló que México es un país con alta importancia en el paso de centroamericanos hacia EUA, por lo que muchos migrantes se han quedado en el país, lo que provoca, en ocasiones, el rechazo de la población.