Octubre es el mes de sensibilización sobre la enfermedad que se posiciona como la mayor causa de muerte en mujeres a nivel global
A pesar de que las estadísticas confirman que la edad más propensa para que se desarrolle cáncer de mama es entre los 35 y los 40 años, jóvenes desde los 15 años no están exentas de padecerlo; incluso esta enfermedad también puede presentarse en varones, señaló la doctora Gabriela Alejandra Cuevas Sanabria, responsable del Programa de Salud del Sistema de Educación Media Superior (SEMS) de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
La clínica puntualizó que los casos de pacientes jóvenes con este tipo de cáncer, se relacionan a que presentaban factores de alto riesgo, como ser portadoras de alteraciones genéticas que elevan el riesgo de presentación, así como tener algún familiar directo con cáncer de primer grado a edad temprana, entre otros. Por tal motivo es importante precisar que la autoexploración debe iniciarse a la edad de 20 años en toda mujer asimismo que deben acudir a evaluación con su médico cada dos a tres años, esto como medida de prevención.
“Lo más importante es la prevención con evaluaciones oportunas. No podemos olvidar que el cáncer de mama es la principal causa de muerte en las mujeres a nivel mundial, por ende es necesario romper tabúes, informarse y conocer sobre el tema. Toda mujer debe investigar si en su familia hay antecedentes, sobre todo si las afectadas han sido familiares de primer grado como: hermana, madre o abuela. De ser así, la paciente debe acudir al médico para tener un seguimiento de tamiz a edad oportuna”, detalló Cuevas Sanabria.
Es importante reconocer que existen dos grupos de pacientes, en lo que a cáncer de mama se refiere: quien se emplea por medio de tamizaje de prevención (evaluaciones periódicas) y aquellas que ya han se han prescrito con la presencia de una masa o “bolita sospechosa” en la mama. Estas últimas son pacientes que se abordan como de diagnóstico.
Conocer estos dos grupos confirma que llevar a cabo las evaluaciones clínicas y de mamografía a edad recomendada —y no esperar a encontrar algún cambio en la mama— es importante para atender el padecimiento a tiempo, ya que ante un cambio es probable que se trate de un estado avanzado del cáncer en el cual no pueda darse tratamiento con resolución positiva.
La doctora Gabriela remarcó la importancia de no esperar a sentir una “bolita” para acudir al médico a un chequeo porque puede ser muy tarde. “En caso de ser así, deberán acudir lo antes posible a la evaluación correspondiente y saber si es algo benigno o no, por lo que deberán perder el miedo o pudor al chequeo médico para poder salvar su vida ante este asesino silencioso”.
En relación a la presencia de cáncer de mama en varones, describió que sí se han presentado casos aunque suelen estar relacionados a alguna alteración o síndrome, como el de Klinefelter. A pesar de eso, recomendó que los hombres también deben estar familiarizados con el tema para que ante cualquier cambio de la mama, acudan al médico.
Los factores protectores que existen para evitar el cáncer de mama son: hacer ejercicio de intensidad moderada, más de cuatro horas por semana y practicar la lactancia materna luego de la concepción. Instó a las mujeres a que reconozcan las lesiones que pueden generar sospecha, como son: mamas rojas, con inflamación sin razón aparente o cambios de temperatura en la zona, secreción del pezón o hundimiento. De igual forma hundimientos en zonas de la piel de la mama y presencia de cambios en la piel con textura similar a la de una naranja.
Inspirados en la campaña global de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los países del globo conmemoran cada octubre como el Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, con el fin de contribuir a aumentar la atención y el apoyo prestados a la detección precoz, el tratamiento y los cuidados paliativos. Específicamente el día 19 del décimo mes del año es el destinado a generar conciencia sobre la importancia de prevenir la enfermedad.
De acuerdo con datos de la Organización, cada año se producen 1.38 millones de nuevos casos y 458 mil muertes por cáncer de mama en todo el mundo. Este tipo de cáncer es el más frecuente en las mujeres, tanto en los países desarrollados como en los que se encuentran en desarrollo. En las naciones de ingresos bajos y medios, su incidencia ha aumentado constantemente en los últimos años debido al aumento de la esperanza de vida y de la urbanización, así como a la adopción de modos de vida occidentales.
La mayoría de las muertes se producen en los países de ingresos bajos y medios, donde los casos se diagnostican en estados avanzados debido a la falta de sensibilización sobre la detección precoz y los obstáculos al acceso a los servicios de salud. El SEMS de la UdeG invita a las Prepas UDG y a la comunidad universitaria, así como a la población en general, a dejar de lado los prejuicios al sumarse a la acción que podría salvar vidas: Tócate para prevenir.