Vacuna contra covid-19 no garantiza que desaparecerá la enfermedad

Expertos señalan que pasarán al menos ocho meses para conocer su efectividad y que se puedan relajar las medidas sanitarias para evitar contagios

La llegada de la vacuna contra la pandemia de covid-19 a México no significa que los 120 millones de mexicanos estarán protegidos contra la enfermedad, y mucho menos que se pueda bajar la guardia en cuanto a las medidas para evitar contagios, declaró el coordinador general de Epidemiología del Hospital Civil de Guadalajara, doctor Mario Márquez Amezcua.

 
En el seminario virtual “La competencia por las vacunas: esperanzas y posibilidades”, organizado por la Universidad de Guadalajara (UdeG) y Jalisco a Futuro, el especialista explicó que la vacuna no será 100 % segura y tardará mínimo ocho meses en demostrar su efectividad.

 
“Podemos estar ilusionados por las vacunas, pero ahora es el momento en que menos debemos de relajar las acciones preventivas, porque las vacunas van a tardar un tiempo en posicionarse, sobre todo entre la población general, mínimo de entre seis y ocho meses es cuando tendríamos una cobertura adecuada”, explicó el médico.

 
Dijo que luego del inicio del periodo de vacunación pasará un tiempo para que la población mundial pueda volver a hacer sus actividades de manera similar a como las hacía antes y será ahí cuando los gobiernos puedan relajar las medidas sanitarias, pues la inmunización completa dependerá no sólo de su efectividad, sino del ritmo en que las empresas puedan producirla y que la población tenga acceso a la vacuna.

 “Hay que ver qué tanta capacidad de cumplimiento van a tener las empresas para todos los países que están pidiendo las vacunas. La lucha contra la covid-19 desde lo personal y lo gubernamental debe de seguir hasta que tengamos eficiencia y veamos que las vacunas funcionan. No se debe de malentender que tenemos la solución mexicana, y que en uno o dos meses vamos a estar cubiertos”, subrayó Márquez Amezcua.

 
Recordó que cerca de 169 proyectos han sido aprobados y están en distintas fases; las más importantes son las que están en la etapa de ensayos y pruebas de eficacia mayores.

  
“El gobierno de México ha pagado a tres empresas para asegurar un esquema de vacunación que iniciaría en diciembre; de ellas, Pfizer entregará 34 millones de dosis, aunque la inmunización alcanzaría para 17.2 millones de personas, debido a que se requiere una dosis doble; la vacuna Cancino requerirá una sola dosis y surtirá 35 millones; la vacuna de Oxford y Astra Zeneca está asegurada en México con 77.4 millones de dosis en dos aplicaciones, con las que se podrá inmunizar a 38.7 millones de personas”, detalló el médico.

 
Queda además el contrato con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros proveedores específicos, en el que podrían distribuir 51 millones de dosis para inmunizar a 25 millones de personas, aunque no se sabe cuándo llegarán al país, añadió.

 
La doctora María Elena Pajarito, adscrita a la Dirección de Promoción a la Salud, de la Secretaría de Salud, dijo que desde diciembre de 2020 hasta diciembre de 2021 México recibirá un total de 198 millones 380 mil dosis que protegerán a alrededor de 116 millones de personas; y en la primera etapa, mínimo hasta finales del año, podrían estar inmunizadas hasta 82 millones de personas.

 
Dijo que la primera vacuna que llegará al país es la de Pfizer, que necesita ultra congelación al ser una vacuna liofilizada, es decir, que será producida en forma de polvo que tiene que ser reconstituido y se debe mantener a -70 grados para luego poder descongelarla. 
 
Además de los retos que implica mantenerla a temperatura adecuada desde que se recibe hasta que es aplicada, se requerirá cambiar el esquema de distribución y tener un centro especializado para su aplicación, de manera que pueda llegar primero al personal de salud y, posteriormente, a los grupos de riesgo y otro tipo de población.

 
El investigador del Centro Universitario de Tonalá en el área de Biología Molecular e Inmunología, doctor David de la Mora, explicó que Pfizer, Moderna y NovaBax tienen vacunas con alta tecnología que usan proteínas recombinantes transportadas en nanopartículas que permiten una buena respuesta del sistema inmune.

 
“Lo que esperamos en las vacunas es que generen una replicación celular, esto nos va a asegurar que la inmunidad sea a largo plazo; si solamente nos quedáramos con la generación de anticuerpos, la vacuna sería efectiva sólo un par de meses y finalmente los anticuerpos se degradarían en un tiempo corto”, recalcó.

 
Por su parte, el director del OPD Hospital Civil de Guadalajara, doctor Jaime F. Andrade Villanueva, aseguró que la vacuna será un factor determinante en el control de la enfermedad, pero hay muchos desafíos por enfrentar.

 
Por ejemplo, que no todos los reactivos que entrarán en circulación han sido probados en sectores vulnerables como adultos mayores o población con obesidad mórbida, además de que se requerirá que la población cumpla con el esquema de vacunación a dos dosis con el mismo tiempo de vacuna para asegurar su efectividad, o que los movimientos antivacunas no obstaculicen su aplicación.

 

 

Deja balance positivo Botón de emergencia

La aplicación del Botón de emergencia por parte del Gobierno de Jalisco dejó un balance positivo que se reflejó en una disminución de contagios y de defunciones, revela el análisis de la Sala de Situación en Salud por COVID-19 de la UdeG.

 
El rector general, doctor Ricardo Villanueva Lomelí afirmó que sí funcionó la estrategia “veníamos con un punto de crecimiento y se logró contener y bajar el ritmo de contagio. Siendo autocríticos, pudo hacerse mejor, pero con los datos que nos deja el comportamiento de la pandemia sí se contuvo el crecimiento”, informó.

 
Añadió que el municipio con mejor tendencia a la baja es Puerto Vallarta que lleva ya tiempo de manera sostenida en esa línea; los municipios que deben aplicar más cuidados son los del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), que presentan 80 % de los contagios.

 
“Lagos de Moreno es un reto, urge abrir un laboratorio ahí, ya que está demostrado que en los lugares donde hemos podido hacerlo y hay un crecimiento de contagios, se contiene”, subrayó.

 
Villanueva Lomelí recordó que el trabajo de la Sala de Situación es que cada decisión que se tome en el tema sea con el mínimo riesgo de contagio posible basado en datos científicos, y cada vez que se ha necesitado dar un paso atrás: la Universidad ha sido muy firme y lo seguirá siendo.

 
“El compromiso es que en dos semanas nos volvamos a ver para evaluar. Si algo se hizo mal lo diremos con claridad; si sale bien todo será momento de que afinemos un protocolo y podamos dar un paso adelante. Lo ideal hubiera sido no abrir muchas cosas, pero las hemos abierto y logrado contener la pandemia”, apuntó.

Dio a conocer que ya se trabaja en protocolos para un regreso gradual a las clases presenciales en enero.

 
El profesor investigador del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI) doctor Humberto Gutiérrez Pulido, expresó que desde mediados de septiembre y la primera quincena de octubre se tenía un crecimiento importante de los contagios activos y desde el momento en que el gobierno estatal anunció el botón de emergencia ahora se empieza a dar una reacción en el comportamiento social y el distanciamiento.

 
“No tenemos que bajar la guardia la sociedad ni gobierno ni empresas. Tenemos 2 mil 500 casos menos. Guadalajara sigue el comportamiento estatal, un descenso importante del orden de 27 % en las últimas dos semanas, y en Zapopan no había dejado de crecer. Tenemos tres semanas de descenso sostenido; mientras que en Tlaquepaque y Tonalá sigue esa tendencia”, informó.

El rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS), doctor José Francisco Muñoz Valle, explicó que en la última semana epidemiológica, del 15 al 21 de noviembre, el número de casos por semana fue de 4 mil 232 casos.

 
“Con respecto a la semana del 8 al 14 de noviembre se tuvo una disminución de 4.1 % a 3.9 % en contagios también en defunciones. En los últimos 15 días, en el AMG hubo un descenso relativo, pero no quiere decir que nos tenemos que confiarnos”, precisó.

 
Ante la llegada de diciembre, época que puede propiciar el incremento de reuniones, dijo que se deben de seguir teniendo las medidas sanitarias como el uso del cubrebocas, que es la primera arma contra la pandemia y mantener la responsabilidad social.

 
Comunicó que los laboratorios de la UdeG trabajarán de manera normal ya que una de las estrategias es incrementar el número de pruebas, sobre todo en estos periodos en que pudiera darse un repunte en el número de casos.

 

  • Boletín Informativo No. 328
    Mariana González / Laura Sepúlveda
    Jueves 26 de Noviembre de 2020
    Guadalajara, Jalisco
    Fotografía: Cortesía webinars UdeG